Casi todos en alguna ocasión hemos tenido una lesión o dolencia que nos ha obligado a valernos de una ayuda para caminar y casi siempre hemos recurrido al uso de bastones o muletas.
Lo que puede parecer muy simple en un primer momento, se llega a complicar enormemente debido a que rara vez nos han explicado su correcta regulación o uso.
¿Muleta o Bastón?
Lo que aquí en España llamamos ‘muletas’ realmente recibe el nombre de ‘bastones ingleses’. Las muletas son las ayudas técnicas que cuentan con un soporte sobre el cual apoya la axila. Estas son de uso muy corriente en muchos países de Europa y en Estados Unidos, pero poco comunes y relativamente difíciles de conseguir en nuestro país.
Lo que es una pena, ya que aunque son bastante mas aparatosas debido a su tamaño y su manejo es mas complicado, debido a su limitación de movimientos, muchas veces son la ayuda ideal ya que ofrecen respecto a los bastones, su gran ventaja es su comodidad, ya que reparten el peso entre axilas y muñecas.
Regular la altura
Para regular la altura de la empuñadura de los bastones , como norma general, ésta debe quedar situada aproximadamente a la altura del trocánter mayor de la cadera.
Si nos llevamos las manos a los bolsillos, tocando por los laterales de las caderas, notaremos una ‘bola’. Esa ‘bola’ es la altura a la que debe quedar la empuñadura de la muleta.
Si bien esta altura puede ser modificada dependiendo de dos factores, el numero de bastones que utilicemos y los apoyos de las piernas. Nuestro traumatólogo o recuperador, nos indicara, dependiendo del grado de nuestra lesión, si debemos o no apoyar la pierna afectada.
1.- Dos muletas, sin apoyo de la pierna afectada.
Por lo tanto, ese pie tiene que ir elevado del suelo.
Utilizar en el pie de apoyo un calzado cómodo, firme y que no tenga suela baja. Esto favorecerá que el otro pie, al no llevar calzado -si va con yeso o férula-, quede algo más corto, con lo cual, es más fácil evitar su apoyo.
Regular la altura del bastón para que quede un poco más alta que el trocánter mayor de la cadera . De esta manera, favorecerá que el cuerpo no se incline adelante, evitando así que el pie lesionado se aproxime al suelo.
2.- Dos muletas, con apoyo parcial de la pierna afectada
La altura sera la del trocánter mayor de la cadera.
La marcha tiene que ser lo más parecida a lo normal, sin saltos, ‘pata coja’, ni inclinarse hacia adelante. Es bueno que se dedique tiempo a practicar bien y se corrijan errores, puesto que una marcha mal realizada puede provocar, molestias, sobrecargas y otras incomodidades.
3.- Una sola muleta
La altura sera la del trocánter mayor de la cadera.
En este momento de la recuperación de una lesión, no necesitamos que el bastón supla a la pierna , sino que lo que pretendemos es que el bastón ayude a la pierna lesionada a soportar el peso del cuerpo. Por lo tanto, el lado de la muleta será el contrario de la pierna lesionada.
Espero que sea de ayuda, un saludo,
Fuente: Tufisio.net
PILATES PUEBLO NUEVO
Ahora mismo lo imprimo, le va a venir de miedo a mi madre, muchisimas gracias, Diego/Gema sois lo mas, 🙂 un besazo!